Para mi gusto, una vivienda tiene que ser tan veraniega como invernal, como si fuera un árbol adaptándose a las distintas estaciones del año. Hay casas perfectas para los meses de calor y otras que te invitan a recogerte bajo una manta frente a la chimenea. El gran reto es dar con esas que combinan las dos facetas… y esta es una de ellas. Las puertas correderas de vidrio con vistas al jardín junto a los interiores de madera crean una atmósfera versátil para disfrutar a lo largo de todo el año.
Está en el distinguido barrio de Sant Gervasi, en una primera planta. Tiene 248 m2 y 98m2 de jardín. Dispone de un amplio salón-comedor, cocina independiente, lavadero, cuatro habitaciones y tres baños. Además, la finca tiene dos plazas de parking incluidas en el precio.
¡Os encantará!
- GASTOS DE COMPRAVENTA NO INCLUIDOS
- Año construcción edificio 1980
¡Muchas gracias!